¿Qué son los robots asesinos y por qué queremos que se declaren armas ilegales?
WILPF forma parte de la campaña internacional Stop Killer Robots, que pretende llamar la atención sobre un nuevo desarrollo armamentístico con inteligencia artificial: armas autónomas, máquinas, que matan sin intervención humana. Como señala nuestra compañera Tica Font, del Centre Delàs, en este vídeo el uso de los robots asesinos, máquinas que toman la decisión de la vida o la muerte de una persona, atenta contra la dignidad humana. Por eso reclamamos que se declaren armas ilegales.
Como se señala en la web de la campaña Stop Killer Robots, “las armas autónomas decidirían quién vive y quién muere, sin intervención humana, algo que cruza los límites morales. Al ser máquinas, no tendrían las características inherentemente humanas como principios éticos”. Además, estas armas son un peligro para la estabilidad, porque “EE. UU., China, Israel, Corea del Sur, Rusia y el RU están desarrollando sistemas de armamento con autonomía importante en funciones críticas para seleccionar y atacar objetivos. Si no se hace nada al respecto, el mundo podría entrar en una carrera desestabilizante de armas robóticas”. No podemos olvidar que “reemplazar las tropas por máquinas haría que la decisión de entrar en guerra fuera más sencilla, y desplazaría más la carga del conflicto hacía los civiles” y por supuesto, al tratarse de máquinas, se corre el riesgo de que estos crímenes contra la población civil queden impunes: “Esta brecha de responsabilidad complicaría el asegurar la justicia, sobre todo para las víctimas”.
Vistos los enormes riesgos que la proliferación de armas autónomas acarrea, reclamamos a los Gobiernos de los Estados que se comprometan a prohibirlas y a establecer “el principio del control humano sobre el uso de la fuerza”. Además, reclamamos a las empresas tecnológicas que se comprometan a “evitar contribuir al desarrollo de armas autónomas”.
