Llamamiento: La voz de las mujeres iraníes debe ser escuchada
Desde marzo de 2023, WILPF ha estado apoyando a un colectivo de mujeres activistas iraníes para solidarizarse con su lucha por la libertad y sus llamamientos a la rendición de cuentas por la discriminación y la violencia de género en Irán, que probablemente equivale a una persecución de género. Ahora, un año después del asesinato de Mahsa Jina Amini a manos de la policía de la moral de Irán y el inicio de las protestas en todo el país, estamos apoyando los llamamientos de las mujeres iraníes a la solidaridad feminista y el apoyo al movimiento Mujer, Vida, Libertad. Compartimos una declaración en nombre y en apoyo de las mujeres iraníes, respaldada por 25 organizaciones de todo el mundo, que pide que se condenen las atrocidades del régimen iraní contra las mujeres, las personas LGBTQI+ y las minorías religiosas y étnicas, y que se emprendan acciones de solidaridad en apoyo de su movimiento por la libertad. Puedes firmar el llamamiento aquí. Varios días después de que se haya reconocido con el Premio Nobel de la Paz el trabajo de defensa de los derechos de las mujeres de la activista iraní Narges Mohammadi, WILPF España se suma a esta reivindicación de reconocer el importante papel de las mujeres iraníes en la defensa de los derechos humanos.
Declaración para recogida de firmas: la voz de las mujeres iraníes debe ser escuchada
Escribimos en nombre y en apoyo de un colectivo de mujeres activistas iraníes que hacen un llamamiento a la solidaridad feminista mundial. Un año después de la muerte de Mahsa Jina Amini a manos de la policía de la moral del régimen iraní, que desencadenó un levantamiento liderado por mujeres en todo el país, la represión del régimen contra las mujeres, las personas LGBTQI+ y las minorías ha empeorado. Las mujeres de Irán continúan su lucha por la libertad y piden que se ponga fin a la persecución de género del régimen, que afecta a más de la mitad de la población del país, mientras el régimen las sigue persiguiendo, amenazando, deteniendo y matando por alzar la voz y tomar medidas.
El 16 de agosto, los servicios de seguridad del régimen iraní detuvieron al menos a 11 mujeres activistas e influyentes en la provincia septentrional iraní de Gilan. Según un medio de comunicación vinculado al Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica, las detenidas están acusadas de “conspirar para incitar al desorden y al vandalismo” en el aniversario de la muerte de Mahsa Jina Amini. Desde el inicio de la revuelta iraní liderada por mujeres en septiembre de 2022, al menos 500 manifestantes han muerto, cientos han quedado ciegas de uno o ambos ojos o han resultado heridas de otro modo, y más de decenas de miles han sido detenidas en Irán.
Las detenciones en Gilan no son casos aislados, y hay informes de numerosas detenciones por parte de las autoridades en Teherán y muchas otras ciudades. Las autoridades citan y advierten a activistas de que no participen en ninguna protesta. En algunos casos, las activistas han vuelto a ser detenidas tras ser puestos en libertad. Nargess Mohammadi, activista por los derechos de las mujeres, hizo pública una declaración desde la tristemente célebre prisión de Evin, en la que denunciaba el empeoramiento del trato dispensado a las reclusas en los últimos meses. Según informes, las fuerzas de seguridad iraníes también han atacado a mujeres y las han sometido a abusos sexuales durante su detención. Los expertos de la ONU también han criticado la persecución de minorías étnicas y religiosas por parte del régimen iraní. En particular, los miembros de la fe religiosa Baha’i han sido objeto de ataques desproporcionados.
La tristemente célebre policía de la moral, responsable de la muerte de Mahsa (Jina), ha regresado recientemente con un nombre diferente y relatos de todo el país informan de agentes que advierten a las mujeres y, en muchos casos, las detienen por no observar correctamente el hiyab. Cabe destacar que el régimen iraní ha propuesto una nueva ley con medidas draconianas contra las mujeres que no respeten el hiyab obligatorio. Los castigos incluyen sanciones económicas inasumibles, duras penas privativas de libertad, prohibición de trabajar y confiscación de dispositivos de comunicación, entre otros. El proyecto de ley se está aprobando a toda prisa en el Parlamento. Expertos de la ONU advirtieron de que el proyecto de ley podría equivaler a un apartheid de género, “ya que las autoridades parecen estar gobernando mediante la discriminación sistémica con la intención de reprimir a las mujeres y las niñas hasta la sumisión total”.
Estos actos de represión contra las mujeres, las personas LGBTQI+ y las minorías son vistos por muchos activistas en Irán y en la diáspora como actos intencionados del régimen para impedir cualquier protesta durante el próximo primer aniversario de la muerte de Mahsa y otras víctimas de las fuerzas de seguridad y las instituciones militares.
Hacemos un llamamiento a los pueblos del mundo para que condenen las atrocidades del régimen iraní contra el pueblo de Irán y muestren su apoyo a la exigencia de las mujeres iraníes de poner fin a la discriminación contra las mujeres, las minorías religiosas y étnicas y las personas LGBTQI+.Te pedimos que muestres tu solidaridad con las mujeres, las personas LGBTQI+ y las minorías iraníes adoptando las siguientes medidas:
- Dar a conocer la difícil situación de las mujeres, las personas LGBTQI+ y las minorías iraníes y mostrar solidaridad en las redes sociales con el hashtag #WomanLifeFreedom.
- Pedir a los representantes iraníes en tu país, así como a los organismos internacionales pertinentes, que condenen el trato que el régimen iraní dispensa a las mujeres y el apartheid de género de facto que han impuesto.
- Pedir a tu Gobierno y a tus parlamentarios que presionen al régimen iraní y a sus enviados para que pongan fin a las atrocidades contra las mujeres en Irán.
- Pedir a tu Gobierno y a tus parlamentarios que proporcionen protección internacional a quienes sufren persecución a manos del régimen iraní.
- Pedir además a la comunidad internacional que actúe para poner fin al apartheid de género en Irán y apoye a las mujeres activistas iraníes. La comunidad internacional debe mostrar su solidaridad con las mujeres iraníes condenando inequívocamente la violencia y la opresión del régimen contra las mujeres.